Ecografía y fisioterapeutas
Un tema de bastante debate en los últimos años es hasta dónde puede profundizar un fisioterapeuta en su formación y ampliación de conocimientos. El uso del ecógrafo entre fisioterapeutas se ha expandido lo suficiente como para que médicos y radiólogos en concreto, hayan sacado las garras defendiendo cierto “intrusismo”. Hay que tener claro, por ambas partes, qué uso es lícito y cuál no lo es. Intentaremos solucionar dudas que pueden surgir a profesionales pero sobre todo a los pacientes, que muchas veces no saben a quién recurrir.
La primera pregunta que se nos vendría a la mente sería la siguiente: ¿Puede un fisio diagnosticar con un ecógrafo?
Los fisioterapeutas no tenemos la capacidad legal para realizar diagnósticos médicos definitivos, incluyendo el uso de ecógrafos, y esto me gustaría que quedara bastante claro. El diagnóstico médico es una responsabilidad que recae en los médicos y profesionales de la salud con licencia para hacerlo, como médicos generales, especialistas en radiología, reumatología u otros campos médicos relevantes.
Podríamos realizar informes de fisioterapia sin problema, sugiriendo un posible diagnóstico que siempre debe valorar el médico. Es decir, si a consulta nos viene un paciente y observamos con el ecógrafo que existe una lesión X, debemos sugerir la posibilidad de dicha lesión, y no darla por hecho. Podemos ser de ayuda para nuestros compañeros, pero hay que tener claros nuestros límites.
Entonces… ¿Para qué usamos los ecógrafos?
La ecografía se ha convertido en una herramienta importante como decíamos, ya que permite una visualización en tiempo real de los tejidos blandos y las estructuras musculoesqueléticas. Esto puede ser muy beneficioso para el diagnóstico fisioterapéutico preciso, la evaluación de lesiones y el seguimiento del progreso de los pacientes.
Algunas de las aplicaciones comunes de la ecografía en fisioterapia incluyen:
- Evaluación de lesiones musculares y tendinosas.
- Guía para procedimientos invasivos.
- Seguimiento del progreso: Los fisioterapeutas pueden utilizar ecografías para realizar un seguimiento del progreso de los pacientes a lo largo del tiempo, evaluando la mejora de las lesiones y ajustando los tratamientos según sea necesario.
- Educación del paciente.
- Investigación y estudio: La ecografía también se utiliza en investigaciones científicas para comprender mejor la biomecánica y la respuesta de los tejidos a diferentes tipos de terapia.
Y haciendo algo de zoom, ¿Qué hacemos exactamente con el ecógrafo?
Valoramos una amplia gama de patologías y condiciones musculoesqueléticas como pueden ser:
- Lesiones musculares: Un ecógrafo puede ayudar a identificar la extensión y la ubicación de las lesiones musculares.
- Lesiones tendinosas: La evaluación ecográfica puede ser útil para visualizar la salud y la integridad de los tendones, identificando tendinitis, tendinosis y rupturas.
- Bursitis: Permite visualizar la inflamación en las bursas, que son pequeñas bolsas llenas de líquido que amortiguan las articulaciones.
- Lesiones ligamentarias: Los ligamentos dañados o lesionados pueden ser evaluados mediante ecografía para determinar la extensión de la lesión.
- Articulaciones: Un ecógrafo puede ayudar a evaluar la inflamación en las articulaciones y guiar las inyecciones terapéuticas intraarticulares.
- Hernias: Las hernias abdominales o inguinales pueden ser identificadas y evaluadas mediante ecografía.
- Quistes y tumores: Un ecógrafo puede detectar la presencia de quistes, lipomas u otras formaciones anómalas en los tejidos blandos (aunque no sea nuestro campo, un fisioterapeuta debe estar familiarizado y formado para detectar posibles banderas rojas y poder derivar, también en ecografía).
- Evaluación pre y post cirugía: La ecografía puede utilizarse para evaluar la condición de los tejidos antes y después de una cirugía, para monitorear la recuperación.
- Evaluación de la postura y el movimiento: Los fisioterapeutas pueden utilizar la ecografía para visualizar los músculos en movimiento y evaluar la función muscular durante actividades específicas.
- Seguimiento del progreso: Un ecógrafo puede ayudar a los fisioterapeutas a rastrear la mejora de las condiciones de los pacientes a lo largo del tiempo.
En general, la ecografía se ha convertido en una herramienta valiosa en la práctica de fisioterapia para mejorar la precisión en el diagnóstico, planificación de tratamientos y seguimiento del progreso. Sin embargo, es importante que los fisioterapeutas que utilizan ecógrafos estén debidamente capacitados para interpretar las imágenes y comprender la anatomía para realizar evaluaciones precisas y seguras.